MASCARAS

CUANDO ERAMOS NIÑOS NOS ASUSTABAMOS DICIENDO QUE HABIA SERES EXTRAÑOS EN EL ROPERO O DEBAJO DE LA CAMA. DESPUES LOS RIGORES DE LA CORDURA NOS IMPONEN SUS PAUTAS Y ESO SE OLVIDA. O NO TANTO. ESTE ES EL RECUERDO QUE UNO DE ELLOS ME OBSEQUIO CUANDO SUPO QUE ME ALEJARIA DE LA FANTASIA.


UNA ANCIANA TIA ME REGALO ESTA MASCARA. ME DIJO: ES ALGO RARO. CUANDO ESTABA COLGADA EN EL PATIO, SIEMPRE LLOVIA. LUEGO LA COLOQUE EN LA COCINA Y VOLVIO A LLOVER. ME CANSE DE ELLA. LA GUARDE EN UN BAUL. Y POR LAS NOCHES OIA COMO LLOVIA DENTRO DE ESAS CUATRO MADERAS.

SE ME OCURRIO PONERLE UNOS TORNILLOS EN LUGAR DE OJOS...Y UN ESPEJO EN LA FRENTE. DESPUES ME DI CUENTA QUE ESTABA VIVA. SU ALIENTO ME LLENO DE HERRUMBRE Y SU ALMA DE GOLEM PARTIO SIN RUMBO FIJO, TAL VEZ EN BUSCA DE SU AMO.